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HISTORIA DEL FRENCH POODLE

13/11/09

Historia del French Poodle


Mucho más antiguos que la reputación del Poodle o Caniche como perro de compañía, y excelente ayudante de los cazadores en el cobro de aves (patos principalmente), son sus ancestros reconocidos como perros de pastoreo y eficientes protectores de rebaños.

Las raíces de la raza se remontan al año 700 D.C. dentro del mundo árabe, en donde los perros pastores, que acompañando a los pueblos moros a través de su conquista por España y Portugal, se aparearon con otros perros locales para contribuir al desarrollo del que hoy conocemos como un inteligente y adorable compañero, muy popular en el mundo: El Poodle.


Perros como el Barbet, el Pastor Ruso Ovcharka y el Antiguo Pudel Alemán, son aquellos que se cree, figuran como los principales fundadores de la raza.
Barbet

Desde el norte de África, los perros que acompañaban al ejército árabe comenzaron a diseminarse por Europa; uno de ellos, el Barbet, dio vida al Cao de Agua (Perro Portugués de Aguas) a su paso por la península Ibérica, y llegó a Francia a principios del siglo XIV, en donde recibió el nombre de “Barbet” debido a las largas barbas que poseía, ostentando un pelaje ondulado, y medidas de 45 a 56 cm. a la altura de la cruz.


Sin embargo, mientras el Barbet apenas llegaba a Europa, El Pastor Ruso Ovcharka ya llevaba cinco siglos establecido al este del continente, pues fue traído en el siglo IX desde Asia por los nómadas Magyares, e introducido a Hungría y Ucrania, en donde se convertiría muy probablemente en el ancestro del Komondor. El Ovcharka se distinguía por alcanzar de 76 a 86 cm. a la altura de la cruz, poseedor de un largo y blanco pelaje que antiguamente se dejaba en forma de cordones.

Ivan el Terrible
A partir del siglo XIV doscientos años pasaron antes de que ambas razas se encontrarar en el camino, y fue durante la época de Iván el Terrible (1533-1583), que perros de color negro y café, llamados Barbet por los extranjeros, fueron introducidos en Rusia, en donde tomaron el nombre de “Barbosses”; para este tiempo, aún no existía estándar para tales Barbosses, por lo tanto las cruzas con Ovcharkas también eran aceptadas, razón por la cual algunos expertos consideran al Barbet como la transición entre el Perro Pastor Asiático, y el Poodle.
Debido al comercio de la época, estos perros de pastoreo fueron aquellos que seguramente se exportaron a Alemania junto con los rebaños húngaros y de Europa Oriental.

En Alemania estos “perros de lanas” se distinguían por su abundante pelaje, generalmente acordonado, que podía encontrarse en dos colores: negro y blanco.
Granja inglesa de 1912.
Se dice que los ejemplares blancos solían utilizarse como defensores del rebaño, pues su color les permitía confundirse con las ovejas para engañar a los lobos, así como distinguirse fácilmente para evitar que el pastor los confundiera con uno de estos animales salvajes. En tanto que los de color negro se usaban para cuidar las granjas de los alrededores de Hannover, sorprendiendo a los ladrones durante la noche.

Los perros pastores más conocidos en Alemania eran el Hessian y el Badian (Odenwald), junto con el Westfalian, todos provenientes de la región de Muensterland.

Sin embargo, desde la Edad Media, tanto elBarbet como sus descendientes, demostraron ser muy eficientes en la cacería, ya que su gusto por el agua los hacía excelentes para el cobro de patos y otras aves acuáticas, por lo cual también eran conocidos en Alemania como “Pudels” (uno que juega con el agua); para entonces ya eran perros de utilidad con un aspecto mal definido.


Fue hasta el siglo XVII en Francia, durante el reinado de Luis XV, que algunos ejemplares se comienzan a criar exclusivamente para compañía, debido a su carácter afectuoso y a su increíble inteligencia. A partir de este momento se desarrollaron diversos tamaños de “Caniches”, cada vez más pequeños, que fueron apareados con Epagneuls para lograr su suave textura de pelo y colores uniformes, llamando la atención de la nobleza, y convirtiéndose en el perro oficial de la corte francesa.

Ya para el siglo XVIII, la raza se encontraba firmemente establecida en Europa, y los pequeños Caniches, compañeros de las damas de sociedad, aparecían retratados al lado de sus amos en infinidad de cuadros realizados por famosos pintores.
Francia fue la responsable de su popularidad, y cuando el Caniche fue importado a Inglaterra, la gente lo conocía como “French Poodle”, pues lo asociaban con Francia, aunque necesariamente el perro no fuera originario de este país.


Sin embargo, aún a finales del siglo XIX, todavía existía la confusión entre Caniches o Poodles y Barbets, pues tres siglos atrás, se denominaban como “Barbets” a todos los perros de muestra de pelo largo. De ahí que algunos autores expongan que el Barbet y el Caniche/Poodle fueron siempre la misma raza; y tienen razón, por lo menos hasta el punto en el tiempo en que el Poodle comenzó a desarrollarse por medio de cruzas con otras razas, para lograr un perro que tuviera una función distinta, pues no sólo se trata de un cambio de nombre, ya que en la actualidad los Barbet y los Poodles se encuentran bien diferenciados, cada uno con su propio estándar racial.

En nuestros días podemos contar cuatro tamaños de Poodle de acuerdo con el patrón racial de la Federación Cinológica Internacional F.C.I.:

Estándar: de 45 a 60 cm. (55 cm. es ideal)
Miniatura: de 35 a 45 cm.
Toy: de 28 a 35 cm.
Mini-Toy: debajo de los 28 cm. (25 cm. es ideal).

Los más grandes, los estándar, que probablemente son los descendientes más directos de los antiguos perros pastores, hoy en día sirven como guías para los ciegos y guardianes, utilizados por la milicia tiempo atrás.

Los Poodle miniatura también conservan algunos de sus instintos como cuidadores de rebaños, pero fueron utilizados en mayor medida por los cazadores y pescadores en la recuperación de presas; e incluso, a principios del siglo XIX los circos de Europa y América los presentaban en su espectáculo, gracias a su habilidad de aprendizaje, para caminar sobre patas traseras y ejecutar trucos.


Los tipo Toy siempre fueron muy populares como “perritos falderos” de las damas de la aristocracia, y son éstos los que seguramente fueron desarrollados durante el reinado de Luis XV a través de cruzas con muchas otras razas, incluyendo el Spaniel, el Terrier y el Maltés, aunque los Poodle Toy y Mini-Toy de nuestros días, han sido desarrollados mediante la reproducción selectiva de otros perros miniatura entre sí, siendo estos tamaños no reconocidos durante las décadas del ’40 y ’50 del siglo XX.